Continuo, en mis viajes sevillanos a ver a los nietos, disfrutando de la belleza de las iglesias sevillanas que siempre guardan una sorpresa para el cansado caminante, que le hace revivir y recordar su pasado por estas bellas calles siempre llenas de vida y alegría , y desde hace un tiempo insoportablemente abarrotadas de "guiris".
Hoy nos vamos a ir a la Calle Mateo Gago, que sale enfrente de la cabecera de la Catedral de Sevilla y al final de la misma,200 metros veremos la espadaña de la bella iglesia de Santa Cruz, que le da nombre al barrio
La actual que hoy vemos se inició en 1655 por parte de Orden Regular de Clérigos Menores que decide levantar el actual templo de Santa Cruz según un proyecto de Sebastián de la Puerta, y que perderían en las desamortizaciones de 1835 la propiedad del templo que pasaría desde entonces a ser ocupado por la parroquia de Santa Cruz.
La fachada estuvo sin rematar doscientos años, pues no fue hasta 1.926 que Juan Talavera Heredia acomete su terminación, según diseño neobarroco, que no terminó hasta el año 1.929.
Entramos por el hastial de la iglesia donde nos recibe su nave principal que termina en el presbiterio y el altar mayor
Entramos por el hastial de la iglesia donde nos recibe su nave principal que termina en el presbiterio y el altar mayor
que en esta fechas cercanas a la Semana Santa ha cambiado un poco su habitual fisonomía que es esta
este 21 de marzo de 2023 presentaba este otro ,tapado el templete y presidido por el Cristo de las Misericordias
El presbiterio recoge unos bello sitiales de coro del s.XVIII y un magnífico órgano barroco de lo mejor que se pueda escuchar en Sevilla.
El templete ,que se encontraba tapado, es una bella joya obra de Blas Molner
El Cristo de las Misericordias habitualmente preside un retablo en el brazo del crucero del lado del evangelio
es una talla del s.XVII muy probablemente obra del genial imaginero sevillano Pedro Roldan
Si continuamos bajando ahora por el lado del evangelio por las capillas situadas bajo los soportales que hacen las naves laterales,
La primera que nos encontraremos es la capilla con el retablo de Santa Ana ,precioso retablo barroco de 1672 ensamblado por Bernardo Simón de Pineda
y el pequeño Niño abrazado al árbol es obra del gran pintor Valdés Leal.
En la siguiente capilla según descendemos hacia el hastial lo ocupa una capilla con un retablo de San Francisco Carraciolo, fundador de los terciarios, cuya talla se debe a algún discípulo de Duque Cornejo del s.XVIII
A continuación veremos la capilla de Santa Bárbara presidida por una talla anónima de la santa del s.XVII
y la última capilla del lado del evangelio antes del hastial está dedicada a la Inmaculada Concepción, cuyo retablo es obra de Bernardo Simon de Pineda y las tallas del mismo del propio Pedro Roldán
En el lado derecho del hastial veremos la pequeña capilla bautismal
Luego ascenderemos en la iglesia por le lado de la epístola y la primera capilla que veremos es la del Retablo anónimo de la Soledad con cuadro de la Virgen anónimo también y con una talla de san Pancracio también de origen desconocido
La siguiente capilla tiene un retablo del s.XIX con una talla anónima de san Francisco.
A continuación veremos una capilla con el retablo del s.XVII de la Virgen del Mayor Dolor obra de Bernardo Simón de Pineda
La última capilla antes de acceder al crucero es la de San Eloy, que preside una bella talla del santo atribuida a Juan de Mesa del s.XVII en un retablo neoclásico ensamblado por Miguel Albis en el siglo XIX, a cuenta del gremio de orfebres, plateros y joyeros de quienes el santo es su patrón.
Ya en el crucero veremos un bello retablo con una imagen de Nª Sª de la Soledad obra de Antonio Eslava Rubio en 1967
Con los continuos cambios de imágenes y de retablos en una visita anterior pude ver esta misma talla en este otro retablo
Habrá que darse una nueva vuelta por la iglesia y esperar que no tengamos que rehacer la entrada con nuevos cambios en la ubicación de la imaginería.
Hasta la próxima amigos.
Cordiales saludos
Vinculado con :
No hay comentarios:
Publicar un comentario