Iglesias de Sevilla : San Luis de los Franceses (I)

Todo llega en esta vida,amigos,y por ello,por fin, pude ver esta maravillosa iglesia sevillana,que no había visto en mi vida y mira que llevo mas de 50 años visitando Sevilla no menos de tres ó cuatro veces al año,sin faltar ninguno y algún año la llegué a visitar mas de 50 veces.
Pero esta iglesia estaba inaccesible,primero por estar cerrada,luego porque era propiedad de no se quien y seguía cerrada ,luego hace un par de años,porque abierta solo se podía visitar con cita previa ,como ahora, cita que no podía obtener porque estaban cerrados los cupos cuando iba a Sevilla, en fin imposible verla.
Gracias a un golpe de fortuna cuando fui a finales de Noviembre de 2019,por casualidad una plaza libre en un grupo para verla un domingo por la mañana a las 11,y allí fui puntual a mi cita con mi desconocida y enigmática enamorada de tantos años, ahora voy a presentárosla.
La iglesia de San Luis de los Franceses ,se encuentra en la calle san Luis,antiguo Decumanus maximun de la romana Hispalis, y muy cerca de la iglesia de Santa Marina.

Fue levantada entre 1699 y 1730 como casa principal de la Compañía de Jesús en Andalucía y fue el exponente de su enorme poder por aquellas fechas.
La Compañía había llegado a Sevilla en 1544,y levantó una casa profesa, un noviciado y una iglesia en la calle Laraña, de la que hoy solo pervive su preciosa  iglesia de la Anunciación.
A inicios del s.XVII,una poderosa ,rica y solitaria señora, doña Luisa de Medina, les donó los actuales terrenos para la construcción de un nuevo y mayor edificio a condición de ser enterrada en la capilla mayor de la nueva sede que estaría bajo el patrocinio de su santo patronímico, san Luis rey de los franceses, primo hermano de san Fernando el rey castellano liberador de Sevilla.
Tras su expulsión de España decretada en 1767 por Carlos III ,la iglesia sufrió muchísimos avatares siendo desacralizada y pasando de ser propiedad del Estado y mas tarde de la Diputación Provincial, hasta su recientísima restauración.
Es la obra de una extraordinario arquitecto y artista barroco como lo fue Leonardo de Figueroa, que la cuidó con el máximo detalle, tanto en su exterior, con su maravillosa fachada retablo, como en el interior como mas tarde veremos

Pero detengámonos a mirarla en su esplendida belleza, mezcla de piedra y ladrillo, menguada por la estrechez de la calle, pero es que tanto los jesuitas como el arquitecto, contaron con que el Ayuntamiento abriría una plaza en frente, plaza que nunca se abrió y de ahí sus apreturas estéticas.
Mirad que remate de su frontispicio

 
donde podemos ver el escudo real de los Borbones y tres bellos arcángeles.
Preciosas son las dos torres ochavadas laterales que rematan la fachada, con un precioso apostolado bajo sus hornacinas

Y una preciosa cúpula con esbelta linterna que cubre la totalidad de la planta del edificio

esta cubierta así como la de las torres me recuerdan las iglesias levantinas.
Miradlas que bonitas desde el patio de los cántaros

Lo curioso ,de esta fachada, es que no indica en absoluto lo que dentro vamos a ver ,y mas enigmático de la iglesia, es su orientación ,que sigue el analema solar,de manera que la puerta principal esta orientada a la salida del sol y el altar mayor recibe una gran cantidad de luz sobre todo en primavera.
Además los retablos de san Estanislao al norte y el de san Francisco de Borja ,orientado al sur reciben su máxima luz curiosamente en los días de sus respectivas  onomásticas.
Entramos por un pequeño atrio de bonita portada y bellas esculturas en los laterales

y de pronto toda la belleza del interior de la iglesia nos sobrecoge, ya no se escuchan las explicaciones de la guía, todo es belleza y armonía,la luz ilumina no solo la iglesia sino también mi interior ,gracias a la hermosura que embarga mi vista

y que se eleva hasta el cielo siguiendo su cúpula

Pero vamos poco a poco, a la entrada, en el brazo del hastial a la derecha veremos estas pinturas murales del s.XVIII de Domingo Martínez ,con las Tres Gracias ,vestidas claro está ,Aglaya (la inteligencia),Talía (la abundancia ) y Eufrosine (la alegría).Pero que en el cristianismo son asociadas con la triple imagen de la liberalidad : Dar,aceptar y devolver los dones recibidos.

y a la izquierda otras pinturas del mismo autor con la emisión de la Bula de Paulo III creando la Compañía de Jesús 

Pero sigamos esta plano para seguir la visita

Vamos a ver en primer lugar el altar mayor (1)
al que dirigimos nuestra primera mirada de asombro ante esa culminación del "horror vacui" barroco,con mas de treinta cuadros anónimos de distintos autores en sus diferentes tamaños por todas las calles del retablo, que al parecer eran propiedad de la mecenas del edificio, entre arabescos,  molduras, espejos, medallones, columnas salomónicas, etc, etc

El cuadro del remate del s.XVII ,de san Luis rey de Francia, es de un maestro seguramente de la escuela de Zurbarán

en medio de la calle central,en una hornacina, una bella Inmaculada obra de Duque Cornejoo

y debajo un bello cuadro anónimo manierista de finales del s.XVI de la Virgen con el Niño

Todos los retablos del templo, están llenos de espejos venecianos fabricados con estaño y mercurio que multiplican los efectos de luz,deformando la realidad para hacerla mas bella y comprensible ,como definiría  muchos años mas tarde ,mi admirado Valle Inclán el esperpento de su obra teatral, gracias a los espejos del callejón del Gato en Madrid.
Mirad que detalles de ese retablo central

En la parte inferior del retablo

admiraremos  este bellísimo Sagrario, una joya, 

y en el altar propiamente dicho, toda una colección de pequeños objetos artísticos y religiosos admirables con un Niño Salvador de la escuela sevillana del s.XVII

A los lados del retablo, son bellísimos los dos ángeles lampararios, muy similares a los de la iglesia del Salvador obra de Cayetano de Acosta, estos posiblemente sean de Duque Cornejo,pues también son muy similares a los de la capilla de diario que luego veremos.

En los laterales estos dos magníficos cuadros posiblemente de Domingo Martinez, una Natividad

y una Anunciación

Vamos a recorrer en sentido circular toda la iglesia según las manecillas del reloj,el primer retablo que veremos es el dedicado a san Francisco Javier ,en el plano con el numero (3),donde el santo recupera un crucifijo regalo de san Ignacio en las islas Molucas, el denominado milagro del cangrejo. 
El retablo es obra de Duque Cornejo, como la totalidad de los retablos del templo excepto el altar mayor ,al igual que todos los angelitos que veis volando por ellos y por la iglesia ,son obra de Juan de Hinestrosa,

tiene un precioso altar 

con bellas pinturas muy pequeñas de la Virgen, a la que el santo tenía gran devoción

En los laterales bellas pinturas de Domingo Martinez

El siguiente altar tiene otro retablo de Duque Cornejo en honor de san Estanislao de Kostka

San Estanislao tiene al Niño Jesús en brazos, recordando el milagro que el santo tuvo cuando la Virgen lo dejó en sus brazos al tiempo que le pedía su ingreso en la Compañía.

El altar bajo el retablo es un precioso relicario donde se conserva el cráneo de san Faustino entre otras reliquias

  
tiene además bellas pinturas relacionadas con la Virgen y con la vida del santo

El tercer retablo del lado de la epístola es el nº (7) es el dedicado a san Francisco de Regis, el apóstol de Vezay y Vivarais ,nacido en Francia y otro de los santos insignia de la Compañía

sobre el que veremos en una hornacina una Dolorosa de Pedro de Mena

  

Seguimos nuestro recorrido ahora por el lado del evangelio y el primer retablo es el de San Luis Gonzaga , 

con un bello Ecce Homo en el remate del mismo

Y precioso cuadros de su vida en los laterales

 

El siguiente retablo corresponde a San Francisco de Borja (4)

con preciosa talla del santo ,en el momento cumbre de su vida, cuando ante el cadáver de la emperatriz Isabel ,aquí representado por el craneo coronado, prometió nunca volver a servir a un señor que pudiera morir

Con bello cuadro en el remate al igual que en los laterales con pasajes de su vida.

Precioso el altar relicario sobre el que se levanta el retablo, con el cráneo de san Fructuoso entre otras reliquias

El último retablo que se encuentra en la iglesia es el de San Ignacio de Loyola nº (2) en el plano, en donde se representa al santo en sus meditaciones de la cueva de Manresa

con otro precioso altar relicario

con increibles detalles

Todos los retablos son bellísimos, pero no lo son menos todos los decorados de la impresionante iglesia, empezando por los pilares que sustentan la bóveda, de falsas columnas salomónicas que son las que parecen sujetar el templo.

Los cuatro pilares se ocultan por los cuatro retablos menores y por los cuatro balcones y celosías colocados encima de ellos

sus balconadas con rejerías dignas de un sueño

sus increíbles y exuberantes remates

En fin, un sueño barroco,

que aún no ha terminado, pues nos espera su cielo,su maravillosa cubierta.
En la entrada al templo ,en la cubierta del hastial, sobre un precioso coro abalconado,

veremos estos maravillosos frescos, con la Exaltación de la Compañía de Jesús y a san Ignacio presidiendo el Templo de la Sabiduría,pintados por Domingo Martínez en 1743

Ahora vamos a ver su genial cúpula,que se levanta sobre un tambor circular ,con muchas ventanas en el tambor ,que la conceden una gran luminosidad

Si unimos con líneas rectas los diferentes puntos de la misma, surge en nuestra mente una estrella de ocho puntas, la del rey Salomón, ó estrella tartésica con toda su carga simbólica,que se puede apreciar en muchos lugares del templo.
En la parte inferior de la propia cúpula veremos unas preciosas pinturas murales,con una representación de la Religión

situadas entre dos pilares, con la Caridad de Dios y la Caridad hacía el prójimo.
Una figura femenina sujeta la Cruz de Cristo ,símbolo de su muerte en una mano y en la otra una Palma símbolo de su Resurrección

a sus lados una representación del Arca de la Alianza 

y al otro el candelabro de los siete brazos

Una unión entre el Viejo y Nuevo Testamento.
En frente de ellas otros bellísimos frescos pintados por Lucas Valdés,una preciosa alegoría de la Eucaristía

El templo era un lugar de celebración de los grandes acontecimientos litúrgicos del noviciado de la Compañía. 
Este tenía además una capilla de diario ,que es otra joya barroca ,que veremos en la siguiente entrada del blog.
Allí os espero amigos para seguir disfrutando de estas joyas que encierra Sevilla en lo mas hondo de su corazón.
Un saludo.



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