Madrid en el recuerdo II

Esta entrada esta básicamente dedicada a los viejos madrileños,a los que nos gusta pasear por sus calles,pero con otras gafas a las que sus lentes les retrotraen en el túnel del tiempo y si no pensad en lo bonito que es imaginarse la Cibeles ,la calle de Alcalá con esos carruajes y el barrio de los Chisperos a la derecha antes de que los gabachos lo destrozaran

Desde la vecina Plaza de Neptuno muchos años más tarde saldrían los autobuses que la moderna linea aérea Iberia ponía a disposición de sus viajeros para acercarlos al lejano aeropuerto de Barajas que estaba donde, perdido en la soledad del páramo castellano, se tomaban aquellos aviones de transporte de hélice y tardabas casi dos horas y media en llegar a Barcelona.
Desde esta terraza contemplaba con mi abuelo la llegada del Avión de Barcelona ,el único que había en el día ,en alguna de las excursiones domingueras en las que pretendía enseñarme el mundo.

¿Abuelo cuando llega? Faltan dos horas ,no te impaciente hijo Y tan tranquilo seguía, con mi refresco hablando con él hasta que se divisaba en la lejanía el aparato que descendía majestuoso de los cielos.Quien me iba a decir que llegaría a tomar cuatro vuelos en un día

 Claro que por aquellos tiempos mi diversión era leer tebeos y trajinar con ellos en las tiendas apropiadas como esta,por 10 cts de peseta cambiabas tebeos de segunda mano por otros de tercera ,por 25 seminuevos y por dos reales los "nuevos" de Hazañas Belicas" "Superman"ó "Roy Rogers".Luego fueron novelas policíacas y de vaqueros de Marcial Lafuente Estefanía

Mi ilusión era ver al Madrid de fútbol,pero mi padre "colchonero" a carta cabal se empeñaba en llevarme al viejo Metropolitano,

hasta que tuvo que dejar de llevarme,porque las chuflas del niño con las cantadas de Pazos,estuvieron a punto de costarle un disgusto y se convenció que seria madridista de por vida.
A mi me gustaban estos colores de siempre

y estos campeones de después

Mi viejo estadio

y el nuevo que hacia poco se acababa de inagurar,allá al final de la Castellana. 
Menudo berrinche familiar el primer día que fuí solo con 12 años al campo,el abuelo financió el viaje y la entrada,2 pts de metro y diez una de general,como llegué un pelin tarde me contaron ,que no vi,el gol de Mateos al Sevilla ,pero me salí con la mía, ya era un hombre,podía andar solo por Madrid.No me quedaba nada y yo sin saberlo.

Sin embargo no conocí la Plaza Mayor cuando en ella paraban y salían las furgonetas para los pueblos cercanos.La mía era de "sorchis",con un olor de sudor y cuartel que aun me perdura en las narices y marmotas,con sus cofias,que se iban perdiendo, y sus rorros en los antediluvianos cochecitos.

pero si llegue a ver los pavos que se vendían en ella por Navidad,aunque esta foto es de antes de la II República.Que hermoso el castellano de "Carnecería"

También conocí a los mieleros que vendían el precioso alimento a voces por la calle y subían a las llamadas de las señoras a los pisos a los que eran reclamados

Y a los afiladores con su inconfundible son de la armónica ,su piedra de afilar y su increíble lenguaje el " Trampitan"que usaban,que luego aprendí en mi estancia en Orense,pues la mayoría eran originarios de Nogueira de Ramuín.

Y que deciros de las verduleras del mercado,las mujeres mas graciosas y mas desgarradas que he conocido en mi vida,aquí tenéis las que se ponían fuera del mercado de san Miguel,en la travesía de Bringas,ay don Benito que bien describiste mi pueblo,donde compraban primero mi abuela,luego mi madre el necesario sustento

Los sufridos maleteros con sus cuerdas y su ,el que la tenia,carretilla para transportar aquellos vetustos y pobres equipajes de los años 50 en las estaciones de tren de Madrid,yo recuerdo ,sobre todo ,Atocha ,tan remozada ella ahora.Las cestas con las gallinas y los embutidos que venían de los pueblos.Aquellos viajes en tren ,con los asientos de madera de la tercera,y los buenos samaritanos dándote un pedazo de chorizo con pan.Que rico que estaba.

Y como no a los barquilleros con su ruleta ,nunca te tocaban mas de dos barquillos y eso con suerte,pero que ricos estaban en la plaza de Oriente

 Y aquellos puestos de horchata que surgían como hongos en todas las esquinas de Madrid cuando llegaba el verano,nunca he vuelto a probar nada igual de refrescante como aquella agua de cebada ni aquella limonada que se ofrecía en la Plaza de las Descalzas de Madrid

Claro que los modernos no habéis llegado a conocer lo que era un domingo de verano en el Parque Sindical Deportivo,que calor ,que agobios.Fuí una vez con mi tío Pepe y su familia,y salí ,convencido sin duda ,de que prefería estar con el botijo cerca en casa y luego a la sombra por la tarde en los toros con mi abuelo en el 8,que era mas entretenido.Pues lo peor del Parque no era estar buscando un sitio donde comer a la sombra y esperar dos horas con un calor de aquí te espero hacer la digestión,sino luego aguantar mas de una hora u hora y media en la cola de la furgoneta que te devolvía a Moncloa y a continuación el Metro abarrotado de nuevo de gente ,vamos inolvidable.Oye pero tan felices ,igual que hoy,pues no dejaba de ser un avance en nuestra modernidad

Bueno se me olvidaba contaros que conseguí meterme en el agua  y sobre todo volver a encontrar a mi familia.En medio de ese gentío se adivina la piscina,que por cierto era enorme,orgullo del Régimen y de su avance social,que sin duda y en perspectiva lo era

Igual después de ver esto nos entienden los jóvenes un poco mejor.
Que lo disfrutéis